Gema Quintas e Irene Pérez, ambas psicólogas de 26 años, llevan un tiempo ejerciendo como profesionales independientes. A principios de este año empezaron a coincidir en las redes sociales y decidieron unir fuerzas bajo el nombre de Psicoeducalia para poder ofrecer de forma conjunta sus servicios de psicoeducación y terapia Gestalt. En esta entrevista nos cuentan en profundidad sus motivaciones para trabajar juntas y sus resultados hasta la fecha.

En primer lugar hay algo que nos gustaría saber ¿Qué es exactamente psicoeducación?

Gema – Psicoeducación es, en el caso de los trastornos, enseñar en qué consiste el trastorno, cómo funciona y cuál es su evolución. Un poco que los padres tengan la conciencia de lo que le pasa a su hijo. A veces, por falta de conocimiento, es fácil que los padres crean que su hijo se comporta de una forma determinada porque él lo elige así, cuando en realidad sufre un trastorno.

Entonces ¿Cómo empezó Psicoeducalia y cuáles son las características más destacables de vuestras especialidades?

Gema – Yo llevo dos años trabajando con Trastornos de la Conducta Alimentaria (TCA) a través de una asociación. He estado en grupos de terapia para afectados y para familiares de afectados, donde se ofrecía psicoeducación.

Psicoeducalia empezó un poco como idea y es en Enero cuando empecé a funcionar por mi cuenta. Cuando estaba en el grupo de padres había muchas dudas que no eran propias del trastorno alimentario, surgían de pautas de conducta típicas por ejemplo de la adolescencia. Como muchos padres decían “yo lo he hecho lo mejor que he sabido”, me plantee  ¿Por qué no enseñarles antes de que haya un trastorno para que lo puedan hacer mejor y darles más herramientas psicoeducativas?

Irene – Yo empecé durante la carrera a tratar con el autismo y continúo con eso. Una vez terminé la carrera me especialicé en terapia Gestalt, un tipo de orientación muy concreta dentro de la psicología. Tiene que ver con una concepción muy humanista de la persona, un trato muy personal, centrado en el aquí y ahora.

Mientras terminaba esta formación empecé a ver pacientes de forma particular. También empecé a notar la necesidad de tratar a grupos y lo hice a través de asociaciones y colaboraciones con temática de violencia de género, adolescentes en riesgo de exclusión social… Podría decirse que quería abarcar un nivel más global, abarcando un campo más amplio con mi trabajo.

¿Qué servicios ofrece cada una/ofrecéis en conjunto?

Gema – Nuestros servicios van desde la psicoterapia individual (con un enfoque de psicoterapia breve de tiempo limitado, focalizada e integradora), pasando por grupos de padres y niños (por ejemplo para tratar el autismo tratamos a padres e hijos), TCA o grupos de desarrollo personal.

A nivel escolar planteamos la opción de hacer algo más que talleres de prevención. Intentamos intervenir un poco más allá para ayudar no solo a adolescentes, sino también a profesores que están quemados por la situación en las aulas. Muchas veces este problema, como comentábamos antes, está relacionado con pautas de conducta de la adolescencia, aunque quizá en esta época se está “patologizando”. Nuestra intención es ofrecer ayuda a profesores y padres para lidiar con estas pautas de conducta.

Irene – Tal vez esto último que dice Gema sea lo más innovador o complementario. Las charlas informativas son tal vez lo típico, sin embargo ofrecer herramientas para poder detectar problemas reales es un apoyo que pueden necesitar tanto profesores como padres.

¿Cómo surgió la idea de trabajar juntas?

Gema – Durante la carrera habíamos hecho algunos trabajos en grupo y funcionábamos bien trabajando en equipo. Después de un tiempo nos dimos cuenta de que estábamos haciendo las dos lo mismo por separado. Nos encontrábamos en todas las redes sociales y nos reíamos de lo parecido de nuestro trabajo.

Fue entonces cuando tuvimos la idea de hacer un taller de relajación en conjunto. Con esta actividad vimos que en efecto teníamos una visión común sobre la psicología y nuestras expectativas.

Irene – Yo ya intentaba en ese momento mover grupos por mi cuenta, pero a mi sola me costaba bastante. Además me parece muy enriquecedor poder llevar un grupo entre 2 personas. Viendo su experiencia y la mía a mí personalmente me motivaba tener la oportunidad de trabajar juntas.

Gema – A parte de la ayuda en el trabajo, poder hablar de los casos que tratamos es un gran apoyo. Tener la opinión de un enfoque complementario es un extra muy valioso.

El trato con el paciente es una relación muy íntima y que requiere dedicación ¿Cómo conseguís hacer el resto de las tareas por vuestra cuenta en el día a día?

Irene – Solemos organizar las horas que tenemos libres para poder ir a buscar información, darnos a conocer, presentar nuestros proyectos… Luego por su cuenta cada una tiene sus pacientes así que es una cuestión de cuadrar nuestros propios horarios y los de los pacientes.

Gema- De momento el ensayo error es nuestra pauta (ríen). No somos expertas en vender un producto así que estamos todavía probando nuestras técnicas de venta. Aunque no nos falle el trato nos falta todavía algo de experiencia en el terreno comercial.

La terapia no requiere de grandes costes materiales ¿Habéis necesitado una gran inversión inicial?

Irene – Las inversiones han sido sobre todo en la página web. Evidentemente no necesitamos tanto capital como un dentista, que requiere de una maquinaria específica.

Gema – Hasta hace poco habíamos estado utilizando cada una su página web. Yo he tenido que aprender cómo hacer una porque no tenía ni idea. Se puede hacer por cuenta propia, pero al final en el acabado se nota que no eres un experto y, además, te cuesta el triple.

Por otra parte, parece una tontería, pero trabajando con infanto-juvenil hay que comprar muñecos, pizarras, algún espejo… Un montón de elementos que normalmente no te suelen ofrecer.

¿Hay algo que os haya supuesto un esfuerzo particularmente grande en vuestro trabajo hasta ahora?

Irene – Para mí, en primer lugar, fue enterarme de lo importante que era un web, desde el punto de vista de que alguien te informe sobre qué tiene que tener la web, posicionamiento en Google… A mí personalmente me costó mucho, soy psicóloga pero este punto no lo conozco.

Gema – Además, aunque te informen también es difícil enterarse de lo que te explican (ríen).

Por otra parte, el tema que comentábamos antes, el marketing. Puedes tener una página web o un servicio muy buenos, pero si no sabes promocionarlo no sirve de nada. Lo mismo pasa con las redes sociales.

Ambas sois muy jóvenes ¿Os ha supuesto algún problema a la hora de tratar con los clientes?

Irene – Pues esa es una escena muy temida en la carrera, que te digan “eres muy joven, ¿Vas a saber ayudarme?”. A mí personalmente no me ha pasado. Yo creo que el paciente, al ver la ayuda recibida, pone muchas esperanzas y sabe reconocer esa ayuda.

Gema – Yo creo que precisamente los años que hemos invertido estudiando antes de esto, consisten en ir creyendo que puedes llevar a cabo este tipo de trabajo. Al final, cuando coges un poco de tablas ya no te planteas cuando te pones delante de alguien si va a pensar que eres joven, si te va a creer o ninguna duda de este tipo. Si el paciente ve que sabes de lo que estás hablando no te pone en duda.

¿Cómo dais a conocer vuestros servicios?

Gema – Como hemos comentado tenemos una web, que actualmente estamos remodelando ya que necesitábamos unir la estrategia en internet. Además, también usamos Twitter y Linkedin, aunque el resultado son más bien relaciones interprofesionales, que está bien, pero para llegar al particular es necesario ir personalmente.

Los colegios son son una población muy sensible a este tipo de necesidades y problemas tanto a nivel psicoeducativo como terapéutico, así que vamos, presentamos nuestras propuestas e indagamos en las necesidades de cada centro. Vemos qué servicios ofrecen ya, cuáles querrían ofrecer y qué podemos aportar nosotras. Además ofrecemos al departamento de orientación de los centros escolares la posibilidad de asesoramiento  y valoración de casos.

El canal internet ofrece grandes posibilidades a la hora de interactuar con vuestros posibles clientes ¿Cómo ha sido la experiencia en este aspecto?

Gema – Lo que intentamos es dar a conocer las noticias más punteras, tanto en redes sociales como en la web, que sean de interés no solo para psicólogos sino para toda la gente que está relacionada de alguna manera con las terapias que nosotras hacemos.

Irene – Yo además con @irenepverdu, mi perfil personal, intento promocionar el blog que usamos para escribir reflexiones sobre educación y terapia. Cada vez que hay una entrada nueva aprovecho para difundirla interactuando con otros usuarios. Esto sirve también para conocer a otras personas y hacer un poco de networking e incluso monitorizar qué hacen otros profesionales.

Ya lleváis un tiempo trabajando por cuenta propia. En vista de vuestra experiencia ¿Cuáles son las mejores y las peores partes de emprender?

Gema – Lo mejor es la ilusión de empezar algo por tu cuenta. Lo peor, desde mi punto de vista es la incertidumbre o tener que hacer cosas que no has hecho antes, en nuestro caso por ejemplo vender un producto.

Irene – Poder organizar tu propio horario también es una gran ventaja, lo que se suele llamar “ser tu propio jefe”.

Gema – Trabajar para alguien siempre tiene la recompensa económica, pero hacer algo tuyo motiva mucho más. Lo vendes de distinta manera y trabajas con más ilusión.

También, más recientemente, ha sido una experiencia muy positiva poder trabajar juntas. Trabajando sola no tenía con quién compartir mi trabajo. Aunque tuviera ideas no tenía con quién compartirlas y tener un feedback. Ahora sí lo tengo y es muy gratificante.

Después de este balance ¿Qué aconsejaríais a alguien que se plantee emprender ahora mismo?

Gema – Yo creo que, como se dice vulgarmente, hay que echarle huevos. Si crees en lo que estás haciendo puede que otros te digan que no vas a tener éxito, pero no seas tú mismo quién lo dice.

Irene – Yo veo muy importante entender que, sobre todo en el sector socio-sanitario se requiere experiencia. Hay que hacer prácticas, voluntariados y no pensar que las cosas van a salir bien solas. Esto no significa que haya que trabajar gratis porque sí, hay que fijar objetivos a largo plazo.

Gema – Psicología es una carrera de fondo. Si pretendes terminar la carrera y ser Freud no vas a poder. No vas a tener pacientes nada más empezar. Hay que trabajar para conseguir que el boca a boca te cree una buena imagen.

Irene – Es muy importarse moverse, para aprender y para crearte un nombre, pero también hay que creérselo un poco, confiar en uno mismo.