Seguro que has visto en una página web la famosa pieza de puzzle en el lugar en el que deberías ver un vídeo. Tu navegador bloquea Flash Player

“Haz clic para ejecutar Adobe Flash Player”.

Este mensaje aparece con cada vez más frecuencia en los navegadores web, y la única forma de activar el complemento de Flash Player es haciendo clic sobre él, y ejecutarlo manualmente.
Adobe Flash Player ha sido uno de los reproductores de contenido multimedia preferido para los navegadores, y por tanto, para internet. Versátil y potente, permite la reproducción de todo tipo de contenido multimedia (juegos, video, audio, páginas web, animaciones…), el problema es que en los últimos años ha sido una gran fuente de vulnerabilidades de seguridad para los navegadores y  para los usuarios.

Los errores de Flash se han ido sucediendo de forma habitual y los avisos del Instituto Nacional de Ciberseguridad (INCIBE) y de la Oficina de Seguridad del Internauta (OSI) han sido constantes. Sólo este año ha habido varias alertas graves. Entre ellas una que alertaba de una vulnerabilidad que podría llegar a permitir el control remoto del equipo del usuario por parte de un atacante. La última en el mes de noviembre; un fallo que permite ejecutar software malicioso en los equipos y provocar la pérdida de información. Y aunque las actualizaciones también han sido constantes, las compañías ya no confían en Flash.

Todo esto ha provocado que Chrome, el navegador de Google, ya bloquea Flash Player por defecto, como ya hicieron hace ya unos meses Mozilla Firefox y Facebook (o iOS que nunca llegó a permitirlo). Y aunque se podrá seguir utilizando Flash Player con la autorización expresa del usuario, la idea es que todo siga evolucionando hacia HTML5. La tecnología de moda en internet, mucho más rápida, flexible y segura; y sin duda la que más futuro tendrá en los próximos años.

Adobe Flash está muriendo y la compañía es consciente de ello, por lo que ya ha movido ficha y en 2015 cambió su herramienta para crear contenido multimedia a Animate CC, basada en estándares HTML5. Además, visualmente es muy parecida a su antecesora y no será un cambio complicado para los creadores de contenido.

Todo esto no es más que otro cambio hacia una web más segura. Como aseguran esta evolución se dará de una forma suave y el único cambio que notará el usuario es una navegación más rápida y segura.